Este mordedor de la marca Difrax nos ha gustado porque combina a la perfección el elemento de dar un descanso a las encías con una toallita que para el bebé hace las veces de peluche. Es fácil de coger y no se pierde por la cuna ya que se ve y se agarra a las mil maravillas. Tampoco se os caerá del cochecito sin que pase inadvertido (sobre todo si atendemos a los colores ; )
Y nos parece mas higiénico que los peluches ya que solo hay que desatar el nudo y lavar el trapito. Ideal no?